En un lugar de la Mancha

En un lugar de la Mancha...
No es una broma, Fernando dejó su pueblo natal para buscarse la vida, como tantos otros incluida yo, en Suiza. En su caso, se instaló en la ciudad de Zurich. Ahí nacieron y viven en la actualidad sus 3 hijos.
Cuando le diagnosticaron ELA, Fernando volvió a su pueblo, donde en su día se había construido una casa, y dejó de trabajar. Entonces estaba bastante bien y no necesitaba ayuda.
Yo le conocí en la red y nos saludamos de cuando en cuando ó chateamos un rato.
Esta fue nuestra conversación de hace unos días. Con su permiso la transcribo porque pensamos que puede servir de preaviso a enfermos y familiares.

Esa tarde le vi conectado y le dije:

A - Hola Fernando, todo bien?

F - Hola Adilia, no. Mi mujer me ha dejado, dice que soy muy malo... Quizas sea verdad, lo peor es que me ha dejado y no me quiere traer mis aparatos de mi discapacidad. He mandado un mail a Alicia, de la Asociacion, espero que lo lea y me pueda ayudar o mandar a la Guardia Civil.

A - Madre mía, ¿cómo es posible? ¿Quien se quedó en la casa? ¿Cuando pasó?

F - Hoy a las 14h. Por favor, si puedes ponerte en contacto con Alicia dile que mande a la Guardia Civil, mi mujer me ha cerrado la puerta con llave.

A- Vale, ya estamos llamando. ¿Donde estan tus hijos? 

Alicia está de vacaciones y dice que me des el número de tu mujer ó, si prefieres, que llamemos directamente a la Guardia Civil, dame por favor tu dirección. 

¿Estás bien? Fernando, di algo... Estamos preocupados. 

Vamos a llamar a la Guardia Civil. Este es mi número de teléfono: XXX XX XX. Llamame si puedes. Ya hemos llamado a la policía de tu pueblo.

F - Gracias Adilia, yo no puedo llamarte porque no me entenderias. Hablo muy mal, solo me entiende mi familia.

A - Dame tu dirección. Hemos llamado ya a la Guardia Civil pero necesitamos tu dirección. Estamos hablando con Alicia, dice que ella ya ha hablado por teléfono con tu mujer y que dice tu mujer que esta arriba y que todo va bien... ¿Llamamos igualmente a la Guardia Civil otra vez? Porque ya la hemos llamado antes, ya tienen tu dirección y se dirigen hacia alli.

F - Gracias Adilia. Ahora ha venido mi mujer, voy a ver como acaba esto, despues te llamo y veremos en qué ha acabado la cosa. Muchas gracias, voy a hablar con mi mujer.

A - No te dejes acobardar. Dile a la policía que tu mujer bajó pero porque la llamó Alicia.

F - No puedo, no me van a entender, esta maldita enfermedad hace perder la dignidad de las personas.

A - Sí, pero en ningún caso hay que permitir que nos maltraten, sea quien sea. Usa el ordenador y pon por escrito toda humillacion, vejación o maltrato psicológico o de cualquier tipo. Escribe cada vez que te encierre. Lo vas guardando en un borrador y seguro que el día que las cosas se pongan peores sacas tus argumentos (esto irá a peor, créeme). Es la 2ª vez que alguien me pide que llame a la policía...

F - Adilia, pues en mi caso no ha servido para nada, la poli ha venido, no se qué habrá hablado con mi mujer, que aquí donde yo estoy no ha venido. Le han dado la razon y yo sigo solo y no me puedo mover, ni siquiera puedo orinar.

A - ¿Como no te han visto? Creo que Alicia no debería haber hablado con tu mujer y darle la oportunidad de contar su versión. ¿Puedes comunicar con tus hijos?

F - No sé quien lo ha hecho mal, pero la cosa no ha funcionado, como te digo, estoy solo y no puedo ni orinar. Estoy intentando ponerme en contacto con mis hijos que han termiinado de trabajar.

A - Creí que todavía te podías valer solo para ir al baño... Pues la policía nos ha llamado y nos han dicho que todo iba bien...

F - Yo puedo andar, pero estoy sentado en una silla muy baja y no me puedo levantar, aparte no tengo mi andaddor, no tengo nada para poder levantarme.

A - ¿Qué puedo hacer? ¿Te doy el número de la policía?

F - Gracias Adilia pero si no es un móvil, no puedo, solo si le mando un sms. Mi mujer le habrá contado cualquier historia a la poli, habrá echado dos lagrimas y la poli se ha ido.

A - ¿Tienes un amigo ó vecina que podamos avisar?

F - Amigos no tengo. Como sabes, he estado mucho tiempo fuera y cuando he vuelto, ya no me entendía nadie, pero sí tengo un vecino que tiene un móvil y si lo necesito le mandaré un sms.

A - Hazlo, dile la verdad. Ay señor... Deberías buscar la web de la policía o de algún periódico local y contarles todo. A Bea le costó lo suyo pero logró que le hicieran caso.

F - Adilia, yo no entiendo nada del portátil, lo compré una semana antes que se fuera mi niño. Solo me dió tiempo de aprender cómo conectarme con mi hija, que entonces estaba en Suiza.

A - ¿Todavía estás solo? Pues todo lo que escribas en Google te aparece en la pantalla, prueba a escribir arriba a la derecha en el espacio en blanco. Pon por ejemplo mi nombre.

F - Adilia, mi mujer ha buscado hombres para que bajaran mis cosas, no ha encontrado a nadie y me ha entrado otra vez en mi casa hasta que mañana busque gente, asi que el problema lo tendré otra vez mañana. Adilia, no sabes como te agradezco tu ayuda.

A - Bueno hasta mañana. Un beso. Ya me hago cargo de escribir a la Asociación para que lo vean cuando vuelvan de las vacaciones.

F - Muchas gracias y perdona que te haya tenido todo el día pendiente solo de mi, no puedo mas que repetirte mis agradecimientos. Besosss.

AL DÍA SIGUIENTE:

A - No te preocupes, es lo lo normal entre seres humanos civilizados. Solo lamento que la patrulla no haya comprobado que no estabas en la vivienda sino encerrado en la cochera, abajo. Dime a qué hora bajó tu mujer?? Y una pregunta delicada, ¿te hiciste pipi encima?

F - Hola Adilia, hoy esta la cosa mas tranquila. Anoche me subieron a la vivienda y se calmó un poco mi mujer. Me subieron a las 20h30 y no me oriné. Gracias a Dios pude aguantar.
A - ¿Estás bien? ¿Te has mudado abajo?

F - Hola Adilia. Ayer me puse a escribirte y no sé qué pasó que de pronto se me apagó el facebook. Queria decirte que no me habían bajado. Ahora la cosa se ha calmado mucho. Adilia, yo llevo para 10 años con ELA, creo que cualquiera se cansa, tanto el enfermo, como el cuidador. A mí me dijeron q con esta enfermedad el pronóstico de vida es de 3 a 5 años. Hay que perdonar que mi mujer esté ya canssada de cuidarme. Yo no sé como lo habría hecho yo en el caso de q fuese al revés.

A - Ya... Comprendo... Pero nadie tiene la culpa, y el cuidador tiene la alternativa de buscar ayuda para descansar una tarde. No irse y dejarte solo sabiendo que no puedes moverte. Yo me hubiera muerto si me pasara a mí, basta que se me salga la mascarilla y... En fin, me alegro que estés bien, pero por si acaso búscate un amigo que viva cerca y que puedas dar su número si pasa otra vez.

F - Yo espero que no pase más, eso me ha prometido mi mujer. De todas formas le he mandado a mis hijos el número de teléfono de la G. Civil de mi pueblo y si vuelve a pasar ellos llaman. Nunca te podré agradecer lo suficiente tu ayuda y tu compañia. Otra vez: GRACIAS.

Después de esto, volvimos a hablar. Fernando me contó que sus hijos se quedaron traumatizados con el episodio. Se han enfadado con la madre y van a estar pendientes aún estando lejos. En cuanto a mí, tengo que destacar estas palabras de Fernando que me han emocionado:
"Gracias Adilia por tu COMPAÑÍA y por darme SEGURIDAD."
Por mi parte le doy las gracias a mis hijos que siempre estan ahí para ser mi voz sin hacer preguntas. En este caso gracias Jon por tu eficacia y por la frase: "Si mamá dice que hay llamar, es que hay llamar".