Desde mi cuarto veo una farola,
cada anochecer se enciende a la misma hora.
Desde el otro lado de la avenida
todas las noches me da la bienvenida.
Abro la cortina, subo la persiana
para que su luz entre por la ventana.
Por entre los árboles sus rayos destella
y desde mi cama parece una estrella.
En las noches de insomnio me hace compañía
y solo se apaga al nacer el dia.
Me tranquiliza cuando estoy sola
ver entre el ramaje la luz de la farola.
Luz que atrae la luz...nunca sola
ResponderEliminarQ preciosa poesía.. Llevas la poesía en el alma, y la farola, tus árboles y todo cuanto te rodea lo percibe y cobra vida para tí. Bien dice José Luis: "La luz atrae la luz". Me ha encantado.
ResponderEliminareis como um simples farol inspira uma poesia tão bonita. bonita mesmo. sei que para além desse farol tão visivel que te acompanha com a sua luz,existem mais faróis por aí, que consegues ver mesmo de olhos fechados. quem te lê vai dar muito mais atenção,a um farol,um tronco ,uma planta,uma pedra.
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