4 mar 2014

Una empleada muy peculiar!!

Ahora que sé todo el alcance de una enfermedad como la que sufro, me cuesta mucho explicarles a quienes me preguntan sobre ella. Muchos están en el inicio y tienen proyectos que, a mi pesar, sé que son irrealizables... Y voy recordando...

Resulta que en un primer tiempo, yo quería que mis hijas tuvieran un empleo aunque fuese a media jornada. Por eso contraté a una chica, que venía de 10h a 15h de lunes a viernes. La idea era que se acostumbrara a ponerme el ordenador, la mascarilla, etc...

Estuvo un año con nosotras. Limpiaba y ordenaba el piso, seguía mis instrucciones en la cocina (una vez me dijo que había aprendido a cocinar gracias a mí). Era muy buena chica y yo me encariñé con ella, como no?.. jeje!!!
Pero faltaba mucho, una vez estaba enferma, o era su hija la que tenía fiebre, o tenía que hablar con la profesora, el caso es que todos los meses faltaba 3 o 4 dias.  Esta niña era un caso. Venía a trabajar en mini falda, camiseta ajustada por encima del ombligo, y lo que más me fascinaba eran sus zapatos de plataforma muy altos. El primer día creía que se cambiaría de ropa... Luego le pregunté si quería un delantal o zapatillas, le dije dónde estaban, pero aparentemente, estaba cómoda así.

Sabía que vivía con su madre, un hermano y una hermana adolescentes, por eso no me lo creía cuando decía que no iba a venir por su niña, de hecho me contaba unas historias de familia bastante extrañas... Decía que la familia almorzaba a las 14h y no le guardaban su parte... Le dijimos que se llevara la comida o que comiera con nosotros. Total, donde comen 7 comen 8 ó 9 ó 10, jeje!!

Pero un día sucedió algo muy fuerte. Auxi llegó como siempre a las 10h, desayunó mientras mi hija me ponía el ordenador en la habitación. Precedentemente ya me había duchado, vestido e instalado en la butaca. Luego se fue un rato a su casa, tranquila, porque entonces yo todavia hablaba algo...
En fin, yo me puse a escribir y Auxi se dispuso a limpiar el salón, en realidad no llegó a empezar, jajaja, vió el sofá y decidió echar una siestecita mañanera... En un primer tiempo al no escuchar ningún ruido, creí que estaría echando un vistazo a alguna revista, y me olvidé de ella. Solo cuando se me fue el ratón y la llamé, me di cuenta del silencio total que había en la casa... Así pasé casi 2 horas... Llamaba y llamaba, se me cayó el ratón, pensé que le pasaba algo, que estaba muerta... ¡Esas cosas pasan!, a medida que pasaban los minutos me fui poniendo más nerviosa, esto es para vivirlo y no se lo deseo a nadie.

Finalmente despertó, apareció en mi cuarto cuando yo ya lloraba de tanta tensión, le dije que llamara a mi hija que tardó 3 minutos ya que vive en el mismo edificio. Nos encontró a las 2 llorando como Magdalenas, preguntó qué pasaba. Auxi tenía todavia las marcas del sofá en la mejilla, nos confesó que había pasado la noche en la discoteca bailando salsa.
Rosa le dijo que se fuese a casa y que viniera a la tarde cuando hablara con su hermana.

Mis hijas lo tenían claro. Una persona en la que no podían confiar, que me hacía pasar disgustos no podía ser. Yo tambien lo sabía pero me costó la propia vida cuando esa tarde las chicas le explicaron muy diplomáticamente la situación.

Todavia la recuerdo con ternura... 

9 comentarios:

  1. Quizá ahora me entiendas, si recuerdas lo que escribió Elia...
    Un beso

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  2. como me lembro dessa Auxi! e desse triste episódio que tirou Rosa completamente do seu estado normal, me lembro também da que veio a seguir, vestida mais ou menos ao mesmo estilo, e de igual modo sempre ,como se estivesse em sua própria casa,recordo que entrava fazia café,abria um livro,e se sentava confortavelmente ,antes mesmo de ter feito o que quer que fosse. salientar que gostavam muito de ti,por isso foram ficando. seguro que se lembrarão de ti com carinho.

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  3. _Eheheh! Adília estive a ler teu relato!
    Eu estava a pensar que só cá em Portugal é que as empregadas abusavam!
    Assinado: Gloria

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  4. Bueno, menos mal que bailaba salsa, imagínate si llega a ser heavy-metal, jejeje

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  5. jajaja.. Que historias!!! Un beso Adilia

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  6. jajajjajaja que muchacha!! Como dice Mimosete , hay que ver que "a gusto" estaba ella, venia tarde y lo primero que hacia era desayunar pausadamente y tranquilamente mientras leia un libro. Es para reirse pero ese dia concreto que relatas no tuvo ninguna gracia, hay que ser completamente inconsciente para hacer una cosa así, menos mal que no paso nada grave en el transcurso de esas dos horas, pero no me quiero ni imaginar el estado de tension por el que tuvistes que pasar. Bueno ahora a reirnos, te quiero eres la mejor.

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  7. Al final es difícil encontrar a alguien ajeno a la familia en quien poder delegar tareas de responsabilidad. La gente va a su bola y parece q solo está en lo q hay q estar el familiar, a quién le afecte y le importe de verás el bienestar de la persona a cuidar. No hay q generalizar, alguna q otra habrá por ahí q se implique y q te puedas ir tranquila al dejarla a cargo de una persona "dependiente", pero madre, el q la encuentre q no la deje escapar, porque eso es un mirlo blanco!

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  8. Hola Adilia, qué bien lo esplicas todo, da gusto leer tu blog, menudo susto la llamabas y estaba dormida es difícil encontrar una persona responsable, aunque si las hay, cómo la familia no te cuida nadie, un abrazo,,

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  9. Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.

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